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martes, 4 de noviembre de 2008

UNA VIL MÁQUINA...


Les voy a hacer una confesión terrible: no me gusta el cine, sólo me gusta cuando filmo.
Entonces hay que saber no ser tímido con la cámara, ser violento, forzarla hasta las últimas consecuencias, porque ella es una vil máquina. Lo que importa es la poesía.
ORSON WELLES

4 comentarios:

Gabriel Saie dijo...

Muy cierto lo que dice Orson.
Te salió severo el hombre

Abrazo

Gabriel Saie dijo...

Muy bueno el dibujo

(me lo bajé)

Luciano Lato dijo...

Vos sabés que me pasa algo parecido cuando filmo??? en serio che...ja...nada más que no tengo nada que ver con este señor...jejeje

Abrazo man!!!

Anónimo dijo...

Querido Lucho!
Una vez un amigo camarografo me contaba sobre el desgaste fisico y emocional que implicaba para él estar ocho horas con el ojo en el visor ¿Por qué? porque la camara y su ojo (y su cuerpo)estaban realizando una operacion brutal y violenta: transformar y reducir la realidad, en todas sus dimensiones (espacio, tiempo, etc.), en toda su diversidad y complejidad, a una simple imagen plana, rectangular y diminuta para finalmente almacenarla en un casetito de morondanga.
¿no es realmente vil esa maquina capaz de hacer semejante atrocidad?

Gran abrazo!